Un equipo de emprendedores rumanos está más cerca de conseguir el romántico sueño de llegar a la Luna en globo. Tras un primer intento fallido en noviembre de 2009, casi un año después la Asociación Rumana de Aeronáutica y Cosmonáutica (ARCA) ha conseguido transportar un sistema de cohetes con un globo lanzador o rockoon a 40.000 metros de altura sobre la superficie del Mar Negro. Una vez alcance las capas altas de la atmósfera, el próximo paso es que los cohetes enciendan sus motores y viajen hasta nuestro satélite natural. Si lo consigue, ARCA puede ganar los 30 millones de dólares que ofrece Google al primer equipo financiado con fondos privados que consiga enviar un robot a la Luna, hacer que recorra 500 metros y que transmita desde allí vídeo, imágenes y datos de la Tierra.
El globo fue elevado desde una fragata rumana en el Mar Negro
El diseño de ARCA es muy sencillo. Se trata de un globo gigantesco que transportará un sistema de tres cohetes a 18 kilómetros de altura. Los dos primeros se activan secuencialmente hasta alcanzar una órbita terrestre baja. El tercero debe dar el impulso hasta la Luna. Una vez conseguido, liberaría sobre la superficie lunar el módulo European Lunar Explorer (ELE). El ingenio es además ecológico, ya que funciona exclusivamente con peróxido de hidrógeno.
Los miembros de ARCA se mostraron muy satisfechos con los resultados de esta segunda prueba. El globo ascendió durante 40 minutos, a una velocidad de 120 km/h y alcanzó una altura de 14.000 metros. Cuando llegó a esa altura, los motores del cohete se encendieron durante 30 segundos y el ingenio se elevó hasta los 40.000 metros. La trayectoria de vuelo fue exitosa, con apenas un error de 800 metros.
Cápsula perdida
Sin embargo, cuando la cápsula regresó, el paracaídas no logró abrirse y el aparto se precipitó al agua. El equipo no pudo recuperarlo, pero no dio demasiada importancia al inconveniente, ya que la recuperación de la cápsula no es un objetivo de la competición de Google (Google Lunar X Prize). Sin embargo, fueron capaces de completar con éxito el primer lanzamiento de un cohete espacial rumano. Además, alcanzaron la máxima altitud que ningún objeto diseñado y construido en Rumanía haya conseguido nunca.
En noviembre de 2009, ARCA fracasó en su primer intento de llegar a la Luna en globo. La operación prácticamente terminó antes de empezar al enredarse los brazos infladores con el material plástico del globo que debían inflar. La aventura tuvo que ser suspendida.
La idea de utilizar rockoons para viajar a nuestro satélite no es nueva, pero lo cierto es que nunca tuvo una buena acogida. Fueron probados por Estados Unidos durante la década de los cincuenta del pasado siglo y el proyecto fue pronto abandonado. Los globos estallaban y se descontrolaban con el viento. Sin embargo, ARCA está dispuesto a conseguirlo.
El diseño de ARCA es muy sencillo. Se trata de un globo gigantesco que transportará un sistema de tres cohetes a 18 kilómetros de altura. Los dos primeros se activan secuencialmente hasta alcanzar una órbita terrestre baja. El tercero debe dar el impulso hasta la Luna. Una vez conseguido, liberaría sobre la superficie lunar el módulo European Lunar Explorer (ELE). El ingenio es además ecológico, ya que funciona exclusivamente con peróxido de hidrógeno.
Los miembros de ARCA se mostraron muy satisfechos con los resultados de esta segunda prueba. El globo ascendió durante 40 minutos, a una velocidad de 120 km/h y alcanzó una altura de 14.000 metros. Cuando llegó a esa altura, los motores del cohete se encendieron durante 30 segundos y el ingenio se elevó hasta los 40.000 metros. La trayectoria de vuelo fue exitosa, con apenas un error de 800 metros.
Cápsula perdida
Sin embargo, cuando la cápsula regresó, el paracaídas no logró abrirse y el aparto se precipitó al agua. El equipo no pudo recuperarlo, pero no dio demasiada importancia al inconveniente, ya que la recuperación de la cápsula no es un objetivo de la competición de Google (Google Lunar X Prize). Sin embargo, fueron capaces de completar con éxito el primer lanzamiento de un cohete espacial rumano. Además, alcanzaron la máxima altitud que ningún objeto diseñado y construido en Rumanía haya conseguido nunca.
En noviembre de 2009, ARCA fracasó en su primer intento de llegar a la Luna en globo. La operación prácticamente terminó antes de empezar al enredarse los brazos infladores con el material plástico del globo que debían inflar. La aventura tuvo que ser suspendida.
La idea de utilizar rockoons para viajar a nuestro satélite no es nueva, pero lo cierto es que nunca tuvo una buena acogida. Fueron probados por Estados Unidos durante la década de los cincuenta del pasado siglo y el proyecto fue pronto abandonado. Los globos estallaban y se descontrolaban con el viento. Sin embargo, ARCA está dispuesto a conseguirlo.
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